Una vez más, La Naturaleza nos pone a prueba…
La falta de lluvia y las inundaciones, son características clásicas que se alternan en este extenso territorio, con episodios de excelentes condiciones para la ganadería.
Las consecuencias no deberían ser sorpresas, pero a su llegada, los son, y con grandes problemas que demandan actitudes, logísticas y recursos que no fueron previstos como para minimizar el fenómeno.
La historia de esta región acumula datos, proyectos, sueños, promesas y obras incompletas, que datan de varios gobiernos provinciales y nacionales, debatidos con instituciones de la región.
Recién en este último tramo, podemos palpar la presencia estatal, en obras y políticas que se puedan “observar” y “utilizar”, para el desarrollo productivo y suavizar los daños de crisis que se alternan en la región, donde no todo es “producción o intereses económicos”, también hay PUEBLOS.
Y es el estimulante percibir los resultados positivos de la suma de “poderes”, alineados por la idoneidad política; la equilibrada relación institucional y las sumas de “Banderas”, que lograron tejer la trama de energías en dirección al objetivo.
Esto se dio en el simbólico escenario de: “Las Gamas”, parados en los mismos pastos secos y polvorientos, abrazados por el mismo sol y calor del Norte, gobierno nacional, provincial, departamental, municipal, instituciones intermedias, productores y vecinos, dieron marco genuino a la expresión más real y fiel de RESPUESTAS EFECTIVAS A TODOS LOS PLANOS AFECTADOS POR EL FENÓMENO.
A pesar de ser sencillamente la interpretación lógica por parte de las autoridades, de una dolorosa situación, la ayuda se convirtió en REALIDAD y el hecho en una PRIMERA VEZ en nuestros pagos.
Dios nos acompañe y nos de claridad y el mismo criterio utilizado en esta ocasión para organizar nuestras inversiones, reclamos y gestiones; en el tiempo, lugar y formas, para no vivir experiencias tan tristes, por errores tan simples.
